Dice la palabra de Dios en Santiago 1:5-8: Y si a alguno de vosotros de le falta sabiduría, pídala a Dios. Quien da a todos con liberalidad y sin reprochar; y le será dada.
Pero pida con fe, no dudando nada. Porque el que duda es semejante a una ola de la mar movida por el viento y echada de un lado a otro.
No piense tal hombre (el que duda) que recibirá cosa alguna del Señor. El hombre de doble ánimo es inestable en todos sus caminos. Esta cita del apóstol Santiago esconde una gran riqueza espiritual.
Santiago dice que; si alguno tiene falta de sabiduría, pídala a Dios. Dándote a entender que, puede haber personas llenas del Espíritu de Dios, pero con falta de sabiduría.
Hay personas que creen en Jesucristo, pero les falta sabiduría.
Por eso el apóstol enfatiza que, pidan a Dios sabiduría que, Él la dará en abundancia y sin escatimar a todos los que le pidan. Porque cuando las personas no son sabias, terminan destruyendo su futuro.
La sabiduría es muy importante para cada uno de nosotros. El doble ánimo, puede impedir que tú avances, a donde Dios quiere llevarte. Es un enemigo silencioso. Que, si no lo enfrentamos, terminaremos siendo destruidos. Porque frena el plan de Dios en nuestras vidas.
¿Qué pasa cuando somos de doble ánimo?
Cuando tenemos doble ánimo, carecemos de estabilidad en todo lo que emprendemos. Cambiamos mucho de ideas, no hay seguridad, ni éxito en nuestros proyectos. Porque nos estamos moviendo sin dirección y sin freno.
El doble ánimo no significa que estás estancada o estancado en un lugar. Te mueves, pero no llegas a ningún lugar. Actúas, pero sin obtener resultados.
¡Dios te va a liberar del doble ánimo! Para que se cumpla su plan en tu vida, y dejes de perder tiempo y fuerzas en una actividad sin sentido, que no te lleva a ningún lugar. Amén.
¿Cómo saber si eres una persona de doble ánimo?
Muy fácil:
- · Si emprendes un proyecto y cambias de opinión sin terminarlo.
- · Cambias de trabajo muchas veces.
- · Te falta confianza y te dejas llevar por las opiniones de otros con facilidad.
- · Te falta determinación para alcanzar tus metas.
Entonces hay que trabajar en eliminar el doble ánimo de tu vida. Para que avances y veas, el fruto de tus esfuerzos, y la mano de Dios moverse a tu favor.
Porque, mientras estés bajo la influencia del doble ánimo, aunque estés conectada o conectado con el poder de Dios no avanzarás. Trabaja en aumentar tu fe.
Sin fe nada alcanza el hombre. Si no tienes fe, no podrás disfrutar de las promesas de Dios para los que le aman. De nada te sirve ir a la iglesia, ofrendar, diezmar, amar a tu prójimo, ayudar al necesitado y no tener Fe. El que no tiene Fe no recibe nada de Dios.
Porque por la fe somos sanados, liberados, bendecidos, y prosperados. Amén.
Dios no se agrada de las personas con doblez de pensamiento. No es bueno pensar una cosa y hacer otra o viceversa. Escudriña tu corazón. Y clama por sabiduría.
De Dios sea la honra y la gloria por todos los siglos.